Los Íberos y la muerte. Lucía Sánchez Iturbe
Como ya ha explicado nuestro profesor, el día 4 de junio fuimos a ver una exposición de la Caixa en la plaza del Pilar sobre los íberos, que eran los pueblos preromanos que vivieron en el este y el sur de Iberia (España)
Lo que más me llamó la atención de este pueblo antiguo fue su forma de tratar las perdidas humanas, la muerte. Cuando la famillia perdía a un ser querido en la guerra o por la edad (morían de media a los 35 años) lo incineraban y los llevaban a una necrópolis, que es un cementerio o lugar destinado para enterramientos. Sin embargo, si el ser querido era un niño o recien nacido se enterraba en la casa de la familia, cerca de la madre porque asi el espíritu del niño estaba siempre cerca de su progenitora y podia disfrutar de las risas, de sus hermanos y de la familia.
Pienso que es algo extraño puesto que por muy hondo que entierres el cadaver de tu hijo, tu casa acaba oliendo a difunto, como en el cementerio. Y entre eso, el humo y que no había más ventilación que la puerta, no sé cómo se podría vivir allí.